La miel aporta múltiples beneficios a nuestro organismo aunque cabe recordar que no está indicada para bebés y niños pequeños por su alto contenido de azúcares y energía. Esto hay que dejarlo claro para no llevarnos ningún susto innecesario pero, para todos los demás, los beneficios de consumir miel son innumerables.
Antes de nada, es necesario matizar algo, y es que no es lo mismo la miel que compramos en la mayoría de supermercados y grandes superficies que la miel ecológica o la miel que viene directa desde el apicultor hasta tu mesa, y es que cuando hablamos de beneficios, como dicen en Bonamel, la miel ecológica te da mucho más.
Beneficios
La miel es uno de los recursos naturales que más se ha aprovechado por los seres humanos. A continuación, tal y como hicimos con el té, veremos cuales son las propiedades y beneficios de este espeso líquido.
Potencial antibacteriano
Debido a las inhibinas presentes en la miel, ésta tiene propiedades importantes como bactericida. Por ejemplo, uno de los potenciales antibacterianos de este producto puede ser importante para el tratamiento del acné y para exfoliar la piel.
Fuente de antioxidantes
El consumo frecuente de miel de abeja puede ser un complemento dietético importante para la prevención de enfermedades cardíacas, del sistema inmune y de procesos inflamatorios.
Endulzador primario
La miel ha sido desde siempre el producto principal que se ha usado para endulzar los alimentos. Debido a sus componentes, la miel no solo endulza sino que también, al mezclarse con otros alimentos, puede potenciar tanto el sabor como las propiedades benéficas del mismo. En este sentido, la miel de abeja sirve como un sustituto del azúcar refinado y a la vez, es más sana.
Importante fuente de proteínas
La miel de abeja contiene enzimas y aminoácidos, los cuáles son la base para la producción de proteínas.
Poder hidratante
La alta concentración de humedad en la miel puede ser fundamental para humectar distintas partes de nuestro cuerpo. Por lo mismo suele utilizarse como hidratante del cabello y el cuero cabelludo. Pero, para que la miel mantenga este propiedad es importante que ésta no se exponga a altas temperaturas porque podría perderlas.
Favorece la digestión
Al mezclarse con otros productos naturales (jugo de limón o canela) la miel puede favorecer la actividad del sistema digestivo. Esto quiere decir que ayuda a metabolizar los alimentos, evitando que se produzca indigestiones estomacales. Además, ayuda a aliviar síntomas de estreñimiento, prevenir reflujo y ayudar a aliviar la diarrea.
Tratamiento de heridas y quemaduras
Desde siempre, la miel ha sido utilizada para curar heridas. Ayuda a aliviar las quemaduras del sol y las manchas en la cara. También se le atribuyen propiedades antisépticas que ayuda a reducir la posibilidad de infección al aplicarse en algunas heridas.
Alivia la tos y el dolor de garganta
Nuevamente al combinarse con otras sustancias como el jugo de lima o limón, la miel alivia el dolor de garganta, además de ayudar a combatir algunas infecciones de este tipo. Así mismo es considerada como uno de los mejores remedios naturales para calmar la tos.
Acción antinflamatoiria
La miel tiene también la propiedad de reducir hinchazones musculares y de aliviar el dolor causado por la inflamación.
Como hemos apuntado anteriormente, la miel puede ser añadida dentro de recetas, a las cuales les aporta un toque especial por su sabor y las propiedades beneficiosas que el alimento tiene.
Diferencias entre miel normal y miel ecológica
La miel ecológica siempre debe ir acompañada de su certificado de calidad orgánica o ecológica. Esto asegura una serie de características que la diferencia de la convencional. Además, el precio que se paga por la miel ecológica suele ser un 35-40% más caro que el de la miel convencional.
Os preguntaréis: si las abejas son siempre las mismas, y tienen libertad absoluta para moverse fuera de la colmena, cómo nos aseguramos de que está comprando un alimento verdaderamente ecológico, y no uno convencional?. Pues bien, hay ciertos factores que los diferencian:
- El entorno
- La alimentación de sus productoras
- El tratamiento de las enfermedades
- El material constructivo de las colmenas
- El método de extracción
El entorno
El área de pecoreo, que es como se conoce tradicionalmente la labor que hacen las abejas obreras cuando salen de la colmena a recolectar néctar y polen, debe estar alejado de las áreas urbanas y de los cultivos extensivos, preferiblemente situados en áreas de alta montaña o zonas silvestres. Aunque una obrera puede volar a más de 3km de distancia, normalmente no suelen alejarse más alla de 1km de la colmena. De esta forma los apicultores ecológicos se aseguran de la ausencia de contaminación en el elemento esencial para la fabricación de la miel: el polen de las flores.
Alimentación
La alimentación de las abejas orientadas a la producción ecológica debe limitarse a la miel y el polen de su propia cosecha. Hay que evitar a toda costa la utilización de jarabes glucosados, o con sacarosa invertida, potenciadores del sabor o colorantes. Son más baratos, pero la utilización de este tipo de alimentos imposibilita la obtención del certificado ecológico de la miel recolectada.
Tratamiento de plagas y enfermedades
La lucha contra las enfermedades en los apiarios ecológicos debe ser a base de tratamientos naturales. No se pueden usar productos químicos o de síntesis, como insecticidas ni antibióticos para el tratamiento de las enfermedades, ya que estos se transmiten a la miel. Esto sucedió en el año 2000 en la miel procedente de china, donde la utilización de fitosanitarios y antibióticos está permitida por la ley local. La consecuencia a este hecho fue que se prohibió la importación de la misma durante 5 años. El tema de la miel procedente de china merece mención aparte, por lo que más adelante podréis ver un post específico de este asunto.
Construcción
Colmena natural en tronco de árbol. Aunque tampoco es necesario que sea tan natural como el ejemplo de la foto, las colmenas deben estar fabricadas a base de productos naturales y no pueden estar pintadas, ya que los componentes de la misma son perjudiciales para las abejas. Las abejas que fabrican miel para ser comercializada como productos ecológicos deberían estar en un hábitat que reproduzca las condiciones naturales en las que viven en total y completa libertad.
Extracción
Por último, el método extractivo del producto de las abejas, debe ser hecho a la misma temperatura que la que tenga la colmena, y se debe recoger por decantación, siendo filtrada suavemente para mantener todas sus propiedades. No se deben usar métodos mecánicos (como bombas mezcladoras) durante esta etapa.
Sector de la miel ecológica
Cualitativamente, el sector apícola es uno de los mejores modelos de producción sostenible, donde confluyen intereses económicos y sociales que contribuyen a la fijación de la población en el medio rural especialmente en zonas donde el desempeño de otro tipo de actividades es más complicado, así como intereses medioambientales, ya que se trata de una producción totalmente respetuosa con el medio ambiente, a la vez que facilita la polinización, función que contribuye al equilibrio ecológico, y a la mejora y el mantenimiento de la biodiversidad.
Estos datos pueden convencer a los productores de miel convencional para producir miel ecológica, certificada con un sello distintivo dirigida a un consumidor que sabe valorar el producto de calidad.