Cuando llega la Navidad, nunca lo hace sola, ya que por lo general viene de la mano de cientos de tradiciones que son las que la hacen una época tan entrañable. No solo se trata de las reuniones en familia, las fechas especiales y los regalos, también es su sabor, y es que esta tiene sus productos gastronómicos propios de la fecha como los turrones o de los que hablaremos en este artículo, los mantecados y los polvorones.
Te contaremos las diferencias entre unos y otros para que sepas identificarlos y además un poco de esa historia que los ha convertido en una de las tradiciones más deliciosas de la época decembrina.
¿Qué es un mantecado?
Los mantecados son unos dulces especialmente típicos de las navidades españolas y que están elaborados con manteca de cerdo, harina y azúcar como ingredientes principales. Sus orígenes datan del siglo XVI y se ubican en las zonas andaluzas de Estepa y Anquera, aunque todavía no se sabe cual de estas dos ciudades fue la cuna del rico producto.
¿Qué es un polvorón?
Por su parte, los polvorones, son dulces bastante parecidos a los mantecados, y de ahí a que muchos crean que se trata de los mismo. Y es verdad que aunque pueden considerarse un tipo de mantecado debido a su elaboración y origen, estos se han ido ganando la suficiente importancia como ser tratados como un dulce aparte.
Al igual que los mantecados, los polvorones se preparan con manteca de cerdo, harina y azúcar como ingredientes principales, pero también se usan las almendras. No obstante, una característica muy propia de ellos es que antes de comerlos, muchas personas tienden a aplastarlos para evitar que se desmenucen.
Diferencias entre mantecados y polvorones
Como dijimos anteriormente, estos dulces, por muy similares que parezcan, no son lo mismo. Somos Los Artesanitos, una de las mejores fábricas de mantecados en Estepa, nos explican sus diferencias:
- Distinto porcentaje de manteca.
Los mantecados y los polvorones, aunque ambos contienen manteca de cerdo, están elaborados a base de distintas proporciones de la misma. Así, los polvorones están hechos con menos cantidad de manteca que los mantecados, por lo que son menos compactos y tienen esa textura arenosa de la cual parte su nombre.
Pero, también con la evolución de las preferencias de los consumidores, que ahora buscan productos más fitness y amigables con la salud de nuestro cuerpo, se han estado elaborando productos que en vez de manteca de cerdo tienen aceite de oliva, y parecen más un tipo de turrón saludable que podrás disfrutar durante toda la navidad in sentirte culpable por aumentar de peso o aumentar tu colesterol.
- Tiempos de horneado diferentes.
Al usar diferentes niveles de manteca, también el tiempo que deben pasar horneándose es distinto. Asimismo, este tiempo en el horno afectará la textura, el aspecto y el sabor de ambos productos, haciéndolos muy diferentes.
- Ingredientes compartidos, pero no 100% iguales
Ambos dulces utilizan azúcar, harina de trigo y manteca de cerdo, pero al igual que sucede con la manteca de cerdo, todos se utilizan en proporciones diferentes en cada una de las creaciones.
Otra diferencia es que los polvorones no llevan huevo, pero sí un toque de limón, mientras que los mantecados no llevan limón pero sí huevo.
Incluso, el azúcar utilizado en ambas preparaciones es distinto, siendo que para la elaboración de los mantecados se usa azúcar en grano, mientras que en el caso de los polvorones se usa es azúcar polvo o glass.
Finalmente, el polvorón siempre se elabora con almendras, mientras que los mantecados no lo usan como ingrediente principal, sino como un acompañante que a veces puede ser frutos secos de navidad en vez de almendras.
- Los mantecados tienen distintas variedades
Los mantecados se elaboran de variedad de formas y por lo tanto tienen diferentes presentaciones: de limón, coco, canela, chocolate… Mientras que los polvorones no, más bien suelen ser catalogados como una variedad de mantecado.
- Distinto consumo
Mientras que el polvorón sólo se consume durante el periodo navideño, en algunas zonas españolas se toman mantecados durante todo el daño, como desayuno o postre.
- Diferencia en la forma
Aunque el mantecado y el polvorón tienen forma de torta, su aspecto guarda ciertas diferencias muy reconocibles. Los polvorones tienden a ser de forma ovalada, mientras que los mantecados son redondos y a veces se decoran con semillas.
Así, son estas las diferencias ente uno y otro, lo que si es que ninguno de ellos debe faltar en tu mesa navideña.
Ahora, un poco de historia
La navidad es una época marcada de tradiciones como las luces que adornan arbolitos, casas y calles, las cenas en familia, los regalos, y por supuesto alimentos como el pavo, los turrones, y otros dulces.
Por ejemplo, es imposible imaginarse una mesa navideña sin una selección de buenos mantecados y polvorones, que aunque no son tan tradicionales como los turrones, con el paso de los años se han integrado muy bien a la tradición, sirviendo como postre a esas entrañables comidas en familia.
Lo que no imaginas es que esta hermosa tradición parte de algo muy diferente, la matanza de cerdos. Y es que el origen de estos dulces viene del excedente de cereales y manteca de cerdo durante el s. XVI y que llevo a la elaboración de variados alimentos a partir de este ingrediente para aprovechar su abundancia. Así, como la matanza de cerdos se lleva a cabo en la época navideña, estos dulces terminaron también siendo un producto de la época.
Como dijimos, aún no está del todo claro si estos dulces se comenzaron a elaborar en Sevilla o Málaga, pero lo que si es que los mantecados y los polvorones de Estepa, que son de los más famoso, tiene como cuna la comunidad de Estepa, asentada en Sevilla.
De hecho, aquí es donde se encuentran todas las industrias dedicadas a la elaboración y envasado de los productos que abarcan estas Indicaciones Geográficas Protegidas “Mantecados de Estepa” y “Polvorones de Estepa” y que cuentan con una larga tradición y la más alta reputación.
Una receta de tradición
Como aún n se sabe de donde proviene exactamente estos dulces, hablaremos de como la receta de Estepa (el lugar de origen más reconocido para estos productos) ha viajado por toda España y se ha transmitido de generación en generación.
Dicha receta data del siglo XVI, aunque es en el año 1870 cuando se produce el nacimiento y comercialización del mantecado tal y como lo conocemos hoy en día. De vuelta a esa fecha, todos los hogares de la zona elaboraban sus propios mantecados y polvorones, pero les llamabas “tortas de manteca” y eran unos dulces más primitivos de lo que conocemos.
Luego, algunos artesanos elaboradores del dulce fueron los que comenzaron a refinarlos, pensando en que fueran más duraderos y cada vez más deliciosos y apetitosos, hasta que por fin desarrollaron sus propios medios para comercializarlos y distribuirlos a diferentes destinos.
Así fue como llegó el refinar la harina, tostarla y hacer más suave aquella primitiva elaboración, que fue sufriendo modificaciones en la elaboración, entre ellas el secado exterior, dejando el producto prieto y seco por fuera, a la vez que tierno en su interior.
Entonces, fueron estas modificaciones en pro de la practicidad que dieron vida al dulce que conocemos ahora y que comenzaron a consumirse en toda España en las épocas navideñas convirtiéndolo en uno de los productos de tradición y prestigio de estas fechas.
Finalmente, al volverse tan famosos, las autoridades locales se hacen presentes, allá por el año 1927, y se reúnen con los fabricantes de los dulces para firmar acuerdos en pro de garantizar de forma certificada la calidad de los productos y convertirlo en un producto autóctono reconocido.
De hecho, fue a partir de allí que el producto comenzó a comercializarse más rápidamente, hasta llegar a todos los rincones y todas las mesas españolas, sobre todo cuando explotó la guerra y las autoridades querían provecharse de la fama y el prestigio del producto para mantener las industrias locales a pesar de la escasez y el racionamiento. Incluso, a mediados de los años 60 empieza a aparecer la figura de cooperativas para la adquisición de materias primas y puesta en común de las condiciones del sector.
Actualmente, esta zona se ha transformado en una comunidad de artesanos que vive por y para la elaboración de los mantecados y polvorones. En ella podemos encontrar más de 19 fábricas encargadas y registradas para la elaboración del producto, casi todas ellas negocios familiares que van pasando la receta y el trabajo de hacer llegar estos dulces a todas las familias en las épocas navideña como una herencia que va de generación en generación.
En fin, deliciosos productos que esconden, detrás de su gran tradición, una historia propia de una comunidad entera y que es celosamente cuidado por generaciones de familias enteras como si se tratase de un patrimonio, el más dulce de todos.